geminis
*********
“Avanzada la noche, Leda, hija del rey de Etolia, dormía como una reina muerta. Súbitamente, unas batientes alas vinieron a verter sobre ella perfume de ambrosia. Despertó sobresaltada, y vio bajo su lecho un cisne resplandeciente. El blanco plumaje del pájaro brillaba como el alba, y el largo cuello acariciaba su rostro.
-MUJER -le dijo el cisne-, NO TEMAS. Soy el dios de la luz y quiero que seas la ilustre madre de dos hijos iguales. Vivirán como viven el sol y la luna, cediéndose mutuamente el sitio. Se llamarán Cástor y Pólux, vendrán a ser dioses y su benevolencia endulzará la pena de la muerte.
Nueve meses después, Leda puso un huevo milagroso en la espesura de un bosque. De él salieron dos niños enteramente iguales. Desde su nacimiento, la misma estrella brilló sobre sus cabezas, y más tarde cabalgaron ambos sobre el mismo corcel y sus manos blandieron la misma lanza”.(1)
Dentro de las diversas variaciones que relatan el nacimiento mítico de los celebres gemelos, esta breve sinopsis podría servir para condensar el punto de partida de un arquetipo, cuya artística representación, se ha ido repitiendo a lo largo de los siglos:la que insiste en la controvertida estructura dual del hombre..
![]() |
Dióscuros s. II aC. Géminis s.XII |
A pesar de que hoy en día, el auge popular de esa imagen resida en el horóscopo y su vaticinio, hubo tiempos en que su aparición era producto de un saber y un desear, la necesidad de indicar la existencia de un elevado conocimiento ideológico.
La imagen de dos jóvenes muchachos, exactamente iguales y de semblante cordial, fue adoptada como insignia del mito y de su concepto. Siempre juntos, podían figurarlos sentados o de pie, separados o bien en emblemática y fraternal unión.
![]() |
GEMINIS S. XII |
Esta última actitud, con los hermanos agarrados entre sí, nos puede, rápidamente, evocar la típica pose que hacen suya los participantes del tradicional deporte de la lucha de agarre, juego que, en la edad media, era altamente practicado y muy aplaudido en fiestas y conmemoraciones populares.
.
.
Quizás por ello, a muchos de los géminis románicos de nuestros templos, se les ha negado una calificación que les es propia, asimilando su posición a la de los tradicionales luchadores, tomándolos por ellos y obviando su existencia.
Teniendo en cuenta que los Dióscuros presidían los Juegosespartanos y eran famosos tanto por su habilidad con los caballos como por su destreza en la lucha cuerpo a cuerpo, es inherente pensar que su estereotipo, se hubiera perpetuado en el medievo a través de nuestros géminis, haciendo su imagen presencia, en celebraciones y Juego, tal como les correspondía antaño.
Pero también la advocación a los héroes paganos Cástor y Polúx fue reconvertida por la pauta ideológica de la época y el momento. Así, la logia de los constructores buscaron otro par de simbólicos "gemelos" a quienes trasladar el padrinazgo: "los dos Juanes", a quienes los masones llamaban San Juan de Verano y San Juan de Invierno y que, cuyas fiestas, coincidían con los dos solsticios. Tal vez para cumplir así el cometido pronosticado en el mito para los gemelos zodiacales que,"vivirían como el sol y la luna, cediéndose mutuamente el sitio".
![]() |
En los festivales de la Antigua Grecia, la lucha estaba reconocida como un deporte mayor, y como una excelente forma para desarrollar las destrezas físicas y mentales |
Y qué mejor forma de honorar ese recuerdo que hacer patente, con esa postura corporal, la condición que presiden?
Aunque, por lo que se muestra en la cantidad de mitos donde los gemelos participan, no tan sólo eranaapreciados como campeones, sino como COMPAÑEROS.
La relación de los dos hermanos era ejemplar. Siempre juntos y unidos, es el símbolo del más puro y profundo amor fraternal.
La relación de los dos hermanos era ejemplar. Siempre juntos y unidos, es el símbolo del más puro y profundo amor fraternal.
La carga conceptual del mito se extiende por asimilación a las diferentes percepciones de su uso, y, si en el folclórico mundo del torneo, la esencia de géminis-dióscuros apadrinaba la lucha festiva, también dicha esencia apadrinaba, en el reservado mundo de los masones, la hermandad entre compañeros.
Una postura corporal, similar a la anteriormente descrita, también la encontramos en el románico, expresada como liturgia iniciática de los gremios de los constructores. Prueba de ello, nos lo ha dejado patente, el ingenio de los mismos canteros.
El combate simbólico del aspirante y el fraternal abrazo de su ingreso en la cofradía, forman parte de un ritual que, con pequeñas variaciones, aparece perfectamente testimoniado en algunos de los libros que hablan sobre dichos estatutos medievales (2)(3).
Transcribimos a continuación alguno de esos ejemplos:
*“El iniciado es elevado hacia lo que se conoce como los cinco puntos de comunión... que son pie contra pie, rodilla contra rodilla, pecho contra pecho, mejilla contra mejilla y mano en la espalda, cinco puntos que aluden a los cinco principales signos que son la cabeza, el pie, el torso, la mano y el corazón, así como a los cinco puntos de la arquitectura y a los cinco órdenes de la Masonería.”
*“¿Cuántos puntos propios hay? –Cinco: pie contra pie, rodilla contra rodilla, mano contra mano, corazón contra corazón y oreja contra oreja.”
“Los cinco puntos de comunión se establecen colocando la parte anterior del pie derecho en la interior del pie del Señor, la parte interior de tu rodilla en la parte interior de la de él, poniendo tu pecho junto al de él, la mano izquierda en la espalda del otro”
“Los cinco puntos de comunión se establecen colocando la parte anterior del pie derecho en la interior del pie del Señor, la parte interior de tu rodilla en la parte interior de la de él, poniendo tu pecho junto al de él, la mano izquierda en la espalda del otro”
La descripción, en dichos textos, de los ceremoniales masónicos son demasiado coincidentes con algunos relieves románicos para no establecer una relación entre ellos, su sincronía es demasiado evidente para obviar que "hablan" un mismo lenguaje:
Los cinco puntos de comunión: pie contra pie, rodilla contra rodilla, pecho contra pecho, mejilla contra mejilla y mano en la espalda |
La descripción, en dichos textos, de los ceremoniales masónicos son demasiado coincidentes con algunos relieves románicos para no establecer una relación entre ellos, su sincronía es demasiado evidente para obviar que "hablan" un mismo lenguaje:
Según dichos textos, uno de los primeros actos que el aspirante debe realizar en su ceremonia de iniciación, es descalzarse de un pie. . |
...pie contra pie, rodilla contra rodilla, mano contra mano, oreja contra oreja... |
Así que, ya sea entre los integrantes de reducidas agrupaciones gremiales como en la de los miembros de la alta jerarquía, el "abrazo-géminis" es una declaración manifiesta donde se profesa fraternidad y ayuda mútua. El símbolo de un compromiso entre iguales.
![]() |
Abrazo entre los Augustos. s.III Diocleciano nombró a Maximiliano coemperador en 285, otorgándole el título de Augusto de Occidente |
*****
Así vemos que, de una forma u otra, la influencia del mito de los gemelos estaba siempre presente en la vida de los gremios medievales, corporaciones que, por otro lado, solían honrar con fiestas solemnes a quienes ellos consideraban sus protectores.
Pero también la advocación a los héroes paganos Cástor y Polúx fue reconvertida por la pauta ideológica de la época y el momento. Así, la logia de los constructores buscaron otro par de simbólicos "gemelos" a quienes trasladar el padrinazgo: "los dos Juanes", a quienes los masones llamaban San Juan de Verano y San Juan de Invierno y que, cuyas fiestas, coincidían con los dos solsticios. Tal vez para cumplir así el cometido pronosticado en el mito para los gemelos zodiacales que,"vivirían como el sol y la luna, cediéndose mutuamente el sitio".
******
***
Dedicado a los preciados herederos del
Imperio de Románico Catalán, Agnès y Martí,
***
Dedicado a los preciados herederos del
Imperio de Románico Catalán, Agnès y Martí,
nuestros "sobrinitos románicos":
.
.
Salud y románico
(1) “La leyenda dorada de los dioses" (MarioMeunier)
(3) "La puerta-Muerte y Resurrección" Arola Edición